
Hoy empezamos el día con varias actividades de que hacer en Tailandia con niños. Vamos a presentar a Gemma a unos animales que tanto le fascinan los elefantes en Tailandia.
Tras haberme despertado a las 07:00, dejo a las chicas en la cama y bajo al pueblo a ver como arranca. Es bonito ver como este pueblo cobra vida y observar la rutina propia de la gente de allí. Los monjes que se dirigen al templo, las motos con remolques, llenas de alimentos, repartiendo el género casi sin detenerse. La ceremonia de ofrenda a los espíritus.
Tras pasar un rato paseando, espero que la primera cafetería que abre, la Cake Go “O”.Pido dos cafés con leche para llevar y arrancar el día con un poco de cafeína decente.
Ya es la hora y despierto al personal. Tras desayunar un poco en la terracita del bungalow, cogemos mochila y nos dirigimos hacia una increíble actividad de que hacer con niños, conocer a los elefantes en Tailandia. El Tom’s elephant.
Tom’s elephant es el centro de elefantes más antiguo de Pai donde ofrecen un programa de interacción «responsable» y que cada vez va adoptando una consciencia más didáctica de turismo respetuoso con el animal. Conocemos a sus propietarios desde hace más de una década. La evolución y la oferta desarrollada se esta adaptando a la realidad de estos elefantes. Es un proceso lento. Pero sé que en este lugar cuidan a los elefantes como a parte de su familia. Además ofrecen programas de mahout (guía de elefante), basado en el aprendizaje en positivo y por imitación, rafting, rafting en balsa de bamboo, excursiones, visitas a tribus de montañas y otras actividades flexibles.
Las actividades con animales son fruto de mucha controversia. Por lo que te recomiendo que si puedes leas comentarios sobre lo que vas a hacer.
Y de repente los elefantes en Tailandia
No han pasado ni diez minutos desde que hemos salido desde el hotel cuando, de repente, justo antes de llegar a una curva a la izquierda nos encontramos con unas instalaciones altísimas de madera donde en su interior se albergan tres ejemplares preciosos de Elefante asiático. Ya nos conocemos, es la cuarta vez que venimos a verlos. Hemos llegado a la hora de su segundo desayuno. Gemma no les tiene miedo alguno y ni corta ni perezosa, mientras estamos hablando con la gerente del lugar, se va a una mesa donde por 25 baht. puedes coger un manojo de plátanos y dar de comer a estos majestuosos animales.
Resulta que el mahout de uno de ellos coge a la niña. Y es él quien con toda calma le explica por gestos las características de los elefantes. Y así, a groso modo, su clase se puede resumir de esta forma:
Poseen unas grandes orejas y una larga trompa.
La trompa sirve para oler (se esconde un plátano en el pantalón), comer ( le enseña como lo coge y ayuda a poner la comida en la boca), comunicarse (lo hace barritar), manipular objetos (le da unas hojas y se sacude las moscas de la espalda) y absorber agua para bañarse o para beber (esto nos dejó un poco mojados). Y de repente la duda de Gemma queda resuelta. Los elefantes tienen pelo. Muy disperso pero lo tienen. Es duro.
Tras esta clase teórica de unos minutos, nos vamos calle abajo con los elefantes a pegarnos un baño todos juntos en el río. Hay que decir, que aunque no lo parece, el río tiene una fuerza que hace que cada vez que caes al agua tengas que fijar fuertemente los pies en el fondo y buscar la espalda del elefante para disminuir la fuerza del agua. Lo digo por si queréis meteros en el agua con los niños que lo tengáis en cuenta, no hay chalecos salvavidas. Y por cierto el pelo de los elefantes pincha. Ha sido divertidísimo. Una increíble actividad de que hacer en Tailandia con niños.
Una vez acabada la sesión de elefantes en Tailandia, nos dirigimos a una especie de mini piscinas. Situadas en la parte posterior de donde se albergan los elefantes. En ellas, hay un grifo de agua, supuestamente termal, que sale a una temperatura caliente que hace que recuperes la temperatura. Acabada la sesión de relax y una vez secos, aprovechamos para comer en el mismo establecimiento. Es la típica comida que encuentras por los demás establecimientos, con platos típicos enfocados al turismo. Arroz con cerdo y huevo (Khao Pad) y una ensalada, acompañado por unos zumos han hecho que la sesión de elefante haya valido la pena.
Como amenaza tormenta, nos dirigimos al Hotel y descansamos un poquito. Gemma se duerme un ratito y nos da juego para una merecida partidita de cartas.
Sácale partido a Pai
Cuando ya es media tarde nos ponemos en marcha hasta el pueblo. Realizamos unas compras de ropa. Y mientras hacemos uso de uno de los recursos viajeros más solicitados si viajas con niños a Tailandia y a cualquier lugar del mundo, la lavandería.
Para saber como lavar la ropa en Tailandia, hay que decir, que las lavanderías trabajan a peso. Hay muchas de ellas en las zonas de mochileros. Mientras que en las zonas de resorts y hoteles se vuelven de precios más altos, porque suelen pertenecer al mismo Hotel.
En las de zona mochilera, si quieres lavar y que se seque tranquilamente cuesta entre 40-45 bath. el kilo de ropa. Si la quieres express, es decir con secadora, pues aumenta a 60-65 bath. Como recomendación y si le tienes aprecio a la ropa que dejáis, comentarte que mejor que la entregues separada por color o blanco. Y di que la quieres limpiar por separado. Sino la mezclan y la ropa blanca aparece gris. Aquí lo dejo todo. También hay servicio de plancha.
En las de resort y hoteles, nosotros no hemos hecho uso de ellas. Más que nada porque por el precio de lavar una camiseta puedo lavar un kilo de ropa en las otras. Prefiero buscarlas.
Nos paramos a comer en uno de los mejores sitios para probar comida tailandesa auténtica y barata, el Nong Beer. En el, se puede probar el Khaw soy. Se trata de unos noodles, fideos de huevo y fideos de huevo cocidos de vinagre, con una especie de sopa a base de curry, hojas de mostaza chiles fritos , leche de coco y con carne que puede ser, pollo o trozos de lomo de cerdo o ternera. Además de distintos arroces servidos con distintos tipos de curry. Aquí encontramos una sopa de arroz muy sencilla que nos dió un poco de juego con Gemma. Un plato básico de que comer en Tailandia con niños el Khao Tom.
Después paseito por la calle peatonal, donde nos reencontramos con un viejo amigo que había montado una pequeña tienda de figuras realizadas de madera con materiales reciclados que nos enamoraron y le compramos trece. Si, trece. Aquí descubrimos cómo enviarlos a España. Otro recurso viajero.Pero esto será la historia de mañana.
Mientras nos dirigíamos cuesta abajo, nos “chocamos” de frente, algunas lo buscaban, con un puesto ambulante de pancakes caseros de todo tipo de sabores. Exquisitos, pese que a mí el chocolate no me termina de gustar mucho. Y antes de irnos a dormir, en la misma calle, un bar con terraza abierta y música. Que nos dejó que por un precio de 100 Bath. probásemos distintos tipos de cócteles y algún que otro combinado. Vamos noche redonda. Ahora sí, en el paraíso de Pai, habíamos terminado un día redondo de los que también se pueden vivir si viajas a Tailandia con niños. Descubriendo con ellos los elefantes en Tailandia.